Respetado(a) Señor(a) Rector(a):
Reciba mi cordial
saludo, extensivo a su Comunidad Educativa, unido a mi deseo por el éxito en
todas las actividades que su institución adelanta en este año 2014.
La escuela es un
lugar primordial donde, además de la formación en las diversas materias del
conocimiento, “se educa y ayuda al joven a captar su propia identidad y a hacer
aflorar las necesidades y deseos auténticos que anidan en el corazón de todo
hombre, pero que con frecuencia pasan desapercibidos e infravalorados: sed de
autenticidad y honradez, de amor y fidelidad, de verdad y coherencia, de
felicidad y plenitud de vida. Deseos que, en último análisis, convergen en el
supremo deseo humano: ver el rostro de Dios”.
Un educador creyente
propone con su profesionalismo y con su testimonio de vida la forma de
existencia que se inspira en Cristo, para que también el joven viva la libertad
de hijo de Dios y experimente el verdadero gozo y la auténtica realización, que
nacen de la acogida del proyecto del Padre. Gracias a maestros como ustedes los valores de la fe
siguen vivos en el alma de tantos estudiantes.
Los educadores participamos de la misión que Cristo encomendó a sus
apóstoles: “Vayan y enseñen”. Pero no es fácil nuestra tarea. Además de la
capacitación pedagógica y la formación permanente, necesitamos la ayuda de la
gracia y las luces del Espíritu, sin lo cual nuestra tarea queda limitada y
estéril.
En este sentido, y con motivo del inicio de labores en los centros e
instituciones educativas, La Vicaría de
Educación y Cultura de la Diócesis de
Pereira ha programado para el próximo 13 de febrero, a las 9:30 a.m., una
Eucaristía presidida por nuestro Obispo, Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez,
en la Catedral
de Pereira, con la cual se dará inicio al Año Académico 2014, y se pondrá en
manos de Jesús Maestro nuestras Instituciones y nuestro trabajo, de modo que
Dios bendiga nuestro servicio como educadores de la comunidad.
En esta eucaristía oraremos por los educadores para que Dios
les ayude a seguir dando buen testimonio de su experiencia cristiana en medio
de sus estudiantes y compañeros de trabajo.
De manera especial, en esta misma ceremonia se conferirá el
«Mandato Eclesiástico» a quienes se dedican a la enseñanza de la Educación
Religiosa, como un reconocimiento público de que dichos educadores son idóneos para
impartir esta enseñanza.
Aunque ya llevamos
algunas semanas de labores, esta es una buena oportunidad para que ofrezcamos a
Dios este nuevo año académico y para fortalecernos espiritualmente, de modo que
podamos cumplir con responsabilidad nuestra misión de ser luz y ejercer la
maestría al estilo del único Maestro por Excelencia: Jesús.
Espero contar con la presencia de un buen número de docentes
de su Institución, y ojalá también alguna representación de estudiantes y
padres de familia, en esta Eucaristía del Inicio del Año Académico y deseo que
Jesús Maestro y María Santísima le guíe durante toda la labor que ahora
comienzan.
P.
Behitman A. Céspedes De los Ríos
Vicario Educación y Cultura
0 comentarios:
Publicar un comentario